El Paris Saint-Germain se impuso 3-0 al FC Salzburgo este martes 10 de diciembre de 2024, en el marco de la 6.ª jornada de la fase de grupos de la UEFA Champions League, en el Stadion Salzburg.
En la ciudad de Mozart, había que interpretar una partitura perfecta para ganar un poco de oxígeno y seguir componiendo hasta el final de la fase de grupos.
Quedan dos partidos por disputar, en enero, contra Manchester City y Stuttgart, encuentros que cobran aún más relevancia e importancia tras el resultado de esta noche. Luis Enrique decidió apostar por un once similar al que dominó a Auxerre, aunque sin abrir el marcador el pasado viernes, con la única inclusión de Neves en lugar de Warren Zaïre-Emery.
Una victoria para los Rouge et Bleu que se construyó rápidamente, con los parisinos controlando el balón y presionando desde el inicio.
Schlager protagonizó una parada milagrosa ante un disparo potente de Hakimi, despejándolo con los puños. Cuando Ramos intentó rematar de cabeza el rechace, el portero austríaco volvió a intervenir para enviar el balón por encima del travesaño (10’). Lee lo intentó poco después con un disparo curvado de zurda que pasó rozando el poste de Schlager (11’). Vitinha también probó suerte con un disparo lejano que el guardameta atrapó sin problemas (12’).
Tras varias advertencias, llegó un milagro para Salzburgo: Ramos no pudo conectar bien un pase perfecto de Hakimi, dejando escapar lo que parecía el primer gol parisino (24’).
Pero era solo cuestión de tiempo para el delantero portugués, que marcó su primer gol de la temporada en una jugada similar. Barcola envió un centro al segundo poste, Hakimi asistió de cabeza al área chica, y Ramos empujó el balón a la red en un tacle, adelantando a los parisinos (0-1, 30’).
Un gol que dio tranquilidad al equipo de Luis Enrique y permitió pensar con más claridad en lo que vendría. Pero había que seguir empujando, marcando, haciendo la diferencia y recuperando confianza.
En la segunda mitad, los austríacos salieron con otra actitud, luchando por su supervivencia en la competición. Sin embargo, la pareja central Pacho-Marquinhos estuvo sólida e impenetrable. Entonces llegó Nuno Mendes para sentenciar. A 20 minutos del final, Barcola desbordó por la banda y sirvió a Doué en el área. El recién ingresado centró atrás hacia Mendes, quien disparó al ángulo opuesto, desatando la alegría parisina (0-2, 72’).
La misión parecía cumplida frente a más de 1,000 seguidores parisinos que hicieron el viaje a Austria. Fueron testigos del primer gol de Désiré Doué con la camiseta del PSG. Tras asistir a Mendes, Doué recibió un pase perfecto de un Hakimi imparable y lo mandó al fondo de la red con un potente disparo bajo el travesaño, celebrando con euforia (0-3, 85’).
La victoria, sumada al regreso de Lucas Hernández, quien entró en el segundo tiempo, convirtió la noche austríaca del Paris Saint-Germain en una sinfonía que esperamos continúe tocándose por mucho tiempo.