Los parisinos logran un empate ante el Clermont

Comptes-rendus

Al final de un partido muy cerrado, el Paris Saint-Germain continuó su formidable racha de invencibilidad al sumar un punto ante el Clermont, en nombre de la 28ª jornada de la Ligue 1 (1-1). De vuelta al partido.

Entre la clasificación para la final de la legendaria Copa de Francia y la perspectiva de volver al emocionante himno de la Liga de Campeones, nuestros parisinos también tuvieron la difícil tarea de mantener el ritmo en la Ligue 1. Pero también había que mirar la situación. Fotografía del partido: después de recibir con Clermont el farolillo rojo de este campeonato, en un encuentro estancado en un calendario apasionante, Luis Enrique lógicamente había gestionado su grupo conservando numerosos jugadores este sábado por la noche. Una elección que luego repercutió en su once inicial, para el cual había realizado nada menos que 9 cambios respecto a su último partido de la Ligue 1. Hay que tener en cuenta que nada menos que dos titis, Senny Mayulu y Yoram Zague, se unieron a su equipo titular; el segundo también jugó su primer partido profesional.

Si una cosa es la fotografía del ranking, otra la realidad del rectángulo verde. Y el partido de ida en Auvernia (0-0) demostró que era imposible confiar en la gran diferencia que separaba a los dos equipos. El inicio del partido también reflejó toda la voluntad de nuestros parisinos en este choque de extremos. Desafortunadamente, contra la corriente del juego - y un poco contra toda lógica - fue el Clermontois quien abrió el marcador con un gol de broma firmado por Keita (0-1, 32).

Y si este objetivo tenía algún mérito, era al menos el de obligar a nuestros Rojos y Azules a alzar la voz. Pero ante un equipo que ya estaba bien reagrupado y que ahora iba a cerrar en doble turno, la tarea necesariamente se volvió más complicada. ¡Pero eso sin contar con la determinación de nuestras tropas, empezando por la de nuestros titis! Senny Mayulu también creyó hacer sonar la revuelta con un gol sublime: un gol finalmente rechazado por una falta previa en la acción... Pero este disparo de cañón anunció claramente el despertar de nuestros Rojos y Azules, retrocedidos como relojes a sus espaldas desde el principio.

Y esto muy rápidamente se materializó en una presión que se volvió insoportable para los visitantes. Porque a medida que pasaban los minutos, las oportunidades empezaron a multiplicarse... ¡como Achraf Hakimi, cuyo rebote pegó en el larguero! (58º) Para aumentar sus posibilidades, Luis Enrique decidió incorporar a Kang In Lee, Kylian Mbappé y Marquinhos. Y si los dos últimos se ofrecieron una triple oportunidad con Hakimi, tuvieron la misma mala suerte, viendo el casco del brasileño repelido por el larguero de Ndiaye (72), antes de que el portero hiciera todo lo posible contra Gonçalo Ramos (80). La suerte no estuvo de nuestro lado, ¡pero había que seguir insistiendo!


¡Y de la dupla Ramos-Mbappé salió la luz! Los portugueses confiaron en el francés para una pared escolar antes de rematar su instinto goleador con un pequeño balón cruzado perfectamente ajustado (1-1, 85).

Al final de un encuentro complicado, el París Saint-Germain consiguió un punto para seguir en lo más alto de la clasificación, logrando así el 27º partido consecutivo sin el menor contratiempo, en todas las competiciones combinadas. Una pequeña hazaña que sitúa a nuestro Rojo y Azul en buenas condiciones antes de los grandes pasos. A partir del miércoles, el Barcelona se presentará en un Boiling Park para una actuación excepcional en el partido de ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones. El escenario está preparado desde hace mucho tiempo. Ya nos estamos frotando las manos...