¡París celebra en el último partido del año!

Tres días después de una actuación consistente en Lille (0-0), los parisinos recibieron a Estrasburgo con el deseo de terminar el año 2020 con estilo en su guarida del Parc des Princes. Privado de una gran cantidad de jugadores, Thomas Tuchel había sacado su sistema en 3-5-2 contra una formación alsaciana muy defensiva.

🔛⚽️ Le 1⃣1⃣ de départ 🆚 @RCSA #PSGRCSA

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— Paris Saint-Germain (@PSG_inside) December 23, 2020

No se tardó en observar que los jugadores de la capital habían encendido sus luces, en vísperas de Nochebuena. Ante un bloqueo bajo y compacto, el Rouge et Bleu tuvo que mostrar una gran disciplina colectiva para llevar peligro y tomar el control del duelo. Un dominio territorial por el alto ascenso de Marquinhos y varias oportunidades claras.

Pero fue finalmente del joven Timothée Pembélé que llegó la luz. Presente en la vanguardia, el juvenil parisino marcó su primer gol en la Ligue 1 al conectar un balón lanzado por Kawashima (1-0, 18').

Rafinha, que firmó un partido muy sólido como siempre, podría incluso haber hecho el segundo con una soberbia gambeta iniciada en el centro del campo y concluido con un disparo desde la derecha (39'). Sin embargo, es difícil encontrar la falla y lograr marcar el paso contra este muro. A la vuelta del vestuario, los parisinos siguieron buscando la llave, pero se toparon con el excelente trabajo defensivo de Simakan.

Pero el Paris Saint-Germain logró encontrar un segundo aire con un Rafinha omnipresente y peligroso en una nueva proyección (68'). Finalmente fue el insaciable Kylian Mbappé quien hizo el segundo tras una alta recuperación, anotando su 12º gol de la temporada para consolidarse en la cima de la tabla de goleadores del la liga (2-0, 80'). Luego, Idrissa Gueye selló el triunfo parisino poco después de entrar al partido: soltó un soberbio golpe claro que dio en la marca (3-0, 89'), antes de que Moise Kean agregara un cuarto gol en el tiempo recuperado ( 4-0, 90' + 1').

A pesar de las ausencias, el cansancio y la necesidad de volver a lo más alto del campeonato, Thomas Tuchel y sus hombres cumplieron maravillosamente su misión, encontrando los recursos físicos y mentales para vencer a un valiente equipo de Estrasburgo. Y este miércoles por la noche, todos los regalos estaban a los pies del árbol: una lluvia de goles incluido el primero de Titi, gestos de alto nivel y un gran espíritu colectivo.
El final de un año 2020 que permanecerá, a pesar de un contexto tan delicado, en las mentes y los corazones parisinos... ¡Un hermoso regalo antes de un reencuentro que promete ser intenso en 2021!