¡PSG a cuartos de final!

Comptes-rendus

Al confirmar su victoria en el partido de ida, el Paris Saint-Germain validó su billete a los cuartos de final de la Liga de Campeones de la UEFA al vencer este martes en el terreno de juego de la Real Sociedad en el partido de vuelta (2-1). ¡Volvamos a esta impresionante segunda ronda!

Tras la pista de las estrellas, el Paris Saint-Germain sigue soñando sin hacer planes para el cometa. Tres semanas después de su autoritaria victoria en el Parque de los Príncipes ante la Real Sociedad (2-0), el equipo de Luis Enrique se encontró con este formidable equipo vasco en su guarida de San Sebastián. Una segunda vuelta apasionante que el técnico español abordó en terreno conocido y con una plantilla bien surtida. ¡Y una nueva sorpresa! De hecho, además del reposicionamiento de Barcola a la derecha del eje para intercambiar todo el ataque, Nuno Mendes también firmó su regreso al lado izquierdo de la defensa, dejando así a la pareja Lucas Hernández-Beraldo crear una bisagra inédita.

Este martes por la noche teníamos que esperar una gran batalla europea. En primer lugar, porque en el ámbito de este club tan especial los vascos nunca antes habían estado liderados en esta campaña. Luego porque, apoyados por un público conquistado por su causa, iban a hacer todo lo posible para ir en busca de dos goles desde el saque inicial. Lo que nos esperaba estaba claro: una lucha constante donde cada contacto y cada decisión podía inclinar la balanza. El inicio del partido también preparó el escenario. Como era de esperar, los jugadores del Real intentaron imponer su ley, intentando intimidar a nuestros parisinos para empujarlos mejor al campo... y crear las primeras ocasiones. En otras palabras, en esta atmósfera eléctrica, los dos equipos tuvieron que mostrar una intensidad loca.

Para nuestros parisinos se trataba sobre todo de ser metódicos. El objetivo era claro: controlar los debates para apagar las chispas encendidas por los lugareños y romper el ambiente. Así, los Rojos y Azules construyeron su resultado con inteligencia, dejando pasar la tormenta cuando el cielo estaba nublado antes de recuperar el control del partido con un estallido de brillantez. Y esta receta dio sus frutos ya que lograron materializar ese ascenso de poder abriendo el marcador. ¡Llegó el rayo de Kylian Mbappé! Puesto en órbita por su cómplice Ousmane Dembélé, nuestro máximo goleador se colocó sobre su pie izquierdo antes de lanzar, tras una finta, un disparo sublime que se metió en la ventana (0-1, 15). ¡Un misil cuyo poder destrozó la pequeña red!

Una ventaja que permitió a los hombres de Luis Enrique retomar los preceptos habituales del técnico español: ¡recuperar el control total del juego, la posesión y las oportunidades! Porque si todo el equipo estuvo a la altura, Kylian Mbappé no dudó en hacer temblar a los vascos hasta el final de la primera parte…. Un augurio para el futuro... Porque nuestros Rojos y Azules, impulsados ​​por sus ansias de control, regresaron del vestuario pasando el segundo. Y fue precisamente en una espléndida salida de balón que el TGV Mbappé, lanzado de su lado, cerró el pie para enviar a los parisinos al paraíso (0-2, 55). O cuando el talento individual sublima a la maestra colectiva.

Evidentemente, era de esperar un intento de revuelta por parte de los vascos, que llevaban más de 20 años esperando en casa estas fases finales... Esto es lo que ocurrió, lógicamente, durante el último medio año de la hora eléctrica. Tuvimos que seguir luchando, una y otra vez. Juega este partido como una final, y cada balón como si fuera el último. Y nuestros parisinos supieron poner los ingredientes inherentes a estos grandes combates, a pesar de la tardía reducción del marcador de este valiente oponente por parte de Merino (1-2, 89º).

Al final de una segunda ronda rica y divertida, el Paris Saint-Germain consiguió su billete para los cuartos de final de la Liga de Campeones de la UEFA, confirmando su ambición de respetar su hoja de ruta en todos los frentes. Grandes avances en los albores de una primavera especialmente apasionante...